Elenco: Pedro Bas, Gonzalo Berón Muñóz, Celeste Gamba, Teresita Rellihan, Rodrigo Tarazona y Mercedes Velasco Suárez.

Dir.: Macarena Del Mastro.

Una familia se reúne en una fiesta sorpresa por el cumpleaños de mamá, pero el festejo no termina como esperaban. Tensiones y conflictos ocultos durante años salen a la luz.

“No hay que llorar” de Roberto Tito Cossa nos sumerge en el corazón de una familia argentina a través de un humor mordaz y reflexivo. Con agudeza, la obra desentraña las miserias humanas, la hipocresía y la codicia que, aunque queramos ocultar, todos tenemos.

La esperanza de un futuro mejor despierta la pregunta: ¿Qué estarías dispuesto a sacrificar para cambiar tu destino?

Una obra que nos hace reír, reflexionar y replantearnos las complejidades de las relaciones familiares en la sociedad individualista en la que vivimos.

Con Ariel Bertone, Ivana Cur, Antonella Saldicco y Nina Spinetta.

Dirección: Nina Spinetta.

Gala, una conductora de televisión con el corazón roto, sale a la ruta y tiene un accidente fatal.

Su culpa hace que Muriel, quién falleció en el episodio, aparezca en su vida como un hecho extraordinario. ¿Por qué aparece Muriel? ¿Qué le pasó a Muriel para estar ese día en ese momento en esa ruta? ¿Por qué se tenían que cruzar estas dos mujeres?

"Muriel desaparece" es una comedia que nos invita a pensar qué cosas impensadas podemos hacer por amor; a preguntarnos qué tenemos que aceptar en nuestras vidas para poder avanzar y qué tenemos que dejar de negar para poder sanar.

Idea e interp.: Agostina Viglietta.

Dirección: Gonzalo Hernán Rodolico.

Se conoce como geisha al término japonés que significa "artista", formado por los fonemas "Gei" que significa "arte y habilidad", y "Sha" que expresa "persona".

En los hechos las Geishas son mujeres educadas para servir.

Agos Viglietta contará historias de sumisión creadas en el momento basadas en disparadores que ofrecerá el público.

Y vos? cuántas veces te sentiste una geisha?

Con Sol Agüero, Manuela Begino Lavalle, Brenda Chi, Abel Cunto, Renata Marino, Matías Prieto Peccia y Abril Suliansky.

Músico:  Facundo Pereira

Dramat. y dir.:  Matías Prieto Peccia.

Cinco obras cortas, cuatro escenas de interacción, seis actores y un músico.

Una compañía de actores interpretará a los más variopintos personajes, para atravesar las historias de cinco obras cortas totalmente diferentes, cuyo punto en común será el desparpajo y el humor.

Invitarán al público a ser parte de la escena en más de una oportunidad.

Con Mariu Fernández, Ugo Guidi, Pablo Mónaco, Mariano Musó, Isabel Noya, Agustin Olcese, Pilar Rodriguez Rey, Bruna Sambataro.

Dramat. y dir.: Martin Repetto.

Vivimos en un mundo en el que la lucha de egos, la hipocresía y la falsedad están a flor de piel. El ponernos la careta para juzgar al otro, de manera lapidaria, es moneda corriente.

Pero, ¿tan distintos somos a los demás?

¿Tan libres de hipocresía creemos estar?

En un ensayo de locos, ocho actores representan la obra “Tartufo” de Moliere, al mismo tiempo que intentan superar sus propias miserias.

Una obra descontrolada que lejos de ponerle el hombro a la falsedad, la toma con humor.

Intérp.: Gilda Scarpetta.

Dirección: Elena Acuña.

Gilda decide homenajear a su hermana Sofía con una obra de teatro que narra la relación entra ambas. Pero la trama de la obra lejos está de esos homenajes edulcorados a los que estamos habituados. No, la trama obedece casi a los chispazos de la memoria, a los pequeños detalles de la vida compartida de estas hermanas, a las discusiones, a los silencios entre ambas. No se centra en la transición de género de Raúl a Sofía. Sí se cuenta el evento, pero desde la óptica de Gilda. No todo es tan cierto en este relato, casi como lo que ocurre con nuestros recuerdos: ¿cuánto es real? ¿cuánto ocurrió de verdad y cuánto hemos inventando? ¿Acaso importa?

La hermana infame es un monólogo por momentos descarnado, una mirada que dista mucho de esa benevolencia con la que recordamos a nuestros muertos.